ESCRIBE LOS EFECTOS DAÑINOS DE TU ADICCIÓN. Puede que no te sientas bien al reconocer todas las formas en las que tu adicción te hace daño, pero ver la lista sobre papel te ayudará para que te decidas a detener tu adicción lo más pronto posible. Saca un lápiz y un trozo de papel y escribe una lista que incluya todos los efectos negativos que has experimentado desde que empezó la adicción.
- Piensa en la forma en la que la adicción haya afectado tu salud física. ¿Tienes mayor riesgo de padecer cáncer, enfermedades cardíacas, o cualquier otra enfermedad como resultado de tu adicción? Tal vez tu adicción ya causo un gran daño físico.
- Lista las formas en las que la adicción te haya hecho daño mentalmente. ¿Te sientes avergonzado por tu adicción? En muchos casos, la adicción lleva a sentimientos de pena y culpa, al igual que a períodos de depresión, ansiedad, y otros problemas emocionales y físicos.
- ¿Cómo ha afectado la adicción tu relación con las demás personas? ¿Tu adicción evita que pases tiempo con las personas que amas, o no te da el tiempo suficiente para llevar el tipo de relación que quieres con las demás personas?
- Algunas adicciones también conllevan una gran carga financiera. Escribe la cantidad de dinero que tienes que gastar a diario, a la semana, o al mes, para mantener tu adicción. Escribe si tu adicción te ha afectado en el trabajo.
- ¿Qué molestias enfrentas a diario por culpa de tu adicción? Por ejemplo, si eres fumador, tal vez estés harto de tener que salirte de la oficina cada vez que quieres fumar un cigarrillo.
HAZ UNA LISTA CON LOS CAMBIOS POSITIVOS QUE QUIERES EN TU VIDA. Ahora que has detallado todos los efectos negativos de tu adicción, piensa en la forma en la que mejorará tu vida una vez que la superes. Crea una imagen mental de tu vida después de superar la adicción. ¿Cómo te ves en esa imagen?
- Tal vez percibas un sentido de libertad que no has tenido en muchos años.
- Tendrás más tiempo para disfrutar con las personas que amas, para practicar tus hobbies, y para hacer lo que realmente quieres.
- Podrás ahorrar dinero de nuevo.
- Mejorará tu salud física y mental. Sentirás mejoras físicas inmediatamente después de dejar tu adicción.
- Te sentirás orgulloso y recuperarás la confianza.
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FINAL ANTES DE DEJAR TU ADICCIÓN. Tener
una lista sólida con los motivos para dejar tu adicción te ayudará a mantener
tu plan a largo plazo. Tus motivos para dejar tu adicción deben ser más
importantes para ti que continuar con tu conducta adictiva. Es un obstáculo
mental difícil, pero es el primer paso que debes dar para dejar la adicción. Tú
eres el único que puede tomar la decisión de dejar tu adicción. Escribe
los motivos verdaderos por los que quieres dejar tu adicción. Sólo tú sabes
cuáles son. Aquí tienes algunos ejemplos:
- Decide dejar tu
adicción porque quieres tener la energía para llevar una vida plena de
nuevo.
- Decide dejar tu
adicción porque ya no tienes dinero para sostenerte.
- Decide dejar tu
adicción porque quieres ser un mejor compañero para tu esposa.
- Decida dejar tu
adicción porque estás determinado a conocer algún día a tus nietos.
PARTE 2: HAZ UN PLAN.
FIJA UNA FECHA PARA DEJAR TU ADICCIÓN. No fijes la fecha para mañana, a menos de que estés seguro que dejar tu adicción de golpe va a funcionar para ti. No fijes la fecha para más de un mes a partir de ahora, porque puede que pierdas tu determinación para entonces. Fija la fecha para las próximas semanas. Esto te da suficiente tiempo para prepararte física y mentalmente.
- Considera la opción de escoger una fecha importante para ti, para que te ayude a mantener la motivación. Tu cumpleaños, el día del padre, el día de la graduación de hija, etc.
- Marca el día en el calendario y cuéntale a las personas cercanas a ti de tu decisión. Ve trabajando en dejar tu adicción para que no te eches para atrás cuando llegue el día. Haz un compromiso firme contigo de dejar tu adicción en la fecha establecida.
BUSCA APOYO PERSONAL Y PROFESIONAL. Puede que no lo veas ahora, pero vas a necesitar todo el apoyo posible para superar tu adicción. Debido a que existen muchas personas que luchan contra sus adicciones, se han creado instituciones maravillosas que sirven como sistemas de apoyo para que mantengas la motivación, para darte consejos para que tengas éxito, y para alentarte a que lo intentes de nuevo si tuviste una salida en falso.
- Busca en persona y en línea grupos de apoyo diseñados para ayudar a las personas con el tipo de adicción específica que enfrentas. Muchos recursos son gratis.
- Haz una cita con un terapeuta especializado en tratar personas con adicciones. Encuentra alguien con el que te sientas cómodo, para que en los próximos meses deposites tu confianza en esa persona. La terapia cognitivo conductual (CBT, por sus siglas en inglés), la entrevista motivacional, la terapia Gestalt, y el entrenamiento de las habilidades necesarias para obtener una mejor vida, son varias de las técnicas que se han demostrado que sirven para aquellas personas que buscan superar su adicción. Un entorno terapéutico te asegura recibir la privacidad que necesitas además de que el tratamiento estará basado en tus necesidades y metas en particular.
- Busca apoyo de tus seres queridos y amigos. Hazles saber lo mucho que este proceso significa para ti. Si eres adicto a una substancia, pídeles que no la utilicen en tu presencia.
IDENTIFICA LOS
DESENCADENANTES. Todos tienen un conjunto de desencadenantes que
activan automáticamente el hábito adictivo. Por ejemplo, si luchas con tu
adicción al alcohol, puede que te resulte difícil salir con tus amigos sin
sentir ganas de volver a ingerir alcohol. Si eres adicto al juego, pasar cerca
de un casino te puede dar ganas de abandonar tu proceso de recuperación.
Conocer los desencadenantes te ayudará a enfrentarlos cuando llegue la hora de
dejar tu adicción.
- El estrés por lo general es una desencadenante para todo tipo de adicciones.
- Ciertas situaciones (como las fiestas u otras reuniones sociales) pueden servir como desencadenantes.
- Ciertas personas también pueden ser desencadenantes.
EMPIEZA A DISMINUIR EL HÁBITO ADICTIVO. En lugar de dejarlo de golpe, empieza a disminuir lentamente el hábito. Para la mayoría de personas, eso hace mucho más fácil el proceso para dejar la adicción. Reduce la frecuencia del hábito, y continúa reduciéndolo gradualmente hasta que llegue el día en que dejes tu adicción.
PREPARA TU ENTORNO PARA DEJAR LA ADICCIÓN. Elimina cualquier
cosa que te recuerde tu adicción de tu casa, de tu auto, y de tu sitio de
trabajo. Deshazte de toda esa parafernalia que acompaña la adicción, y también
de cualquier otro objeto que te recuerde tu conducta adictiva.
- Considera la opción de reemplazar dichos objetos con cosas nuevas que te hagan sentir calmado y positivo. Llena tu nevera con alimentos sanos. Compra un par de libros o DVD (asumiendo que no tienen contenido que pueda funcionar como desencadenante). Coloca velas y otros artículos estéticamente agradables por todo tu hogar.
- Puede que quieras redecorar tu habitación, reacomodar los muebles, o simplemente comprar un nuevo par de cubre almohadas. Cambiar tu ambiente te da la sensación de que tienes un nuevo comienzo.
PARTE 3: DEJA LA ADICCIÓN Y MANEJA LA ABSTINENCIA.
DETÉN EL COMPORTAMIENTO ADICTIVO COMO LO PLANEASTE. Cuando llegue el gran día, mantén tu promesa y deja tu adicción. Los primeros días serán difíciles. Mantente ocupado y sé positivo. Empezaste el camino hacia una vida libre de adicción.
- Si necesitas distraerte, prueba con el ejercicio, realizar un huevo hobby, cocinar, o salir con tus amigos. Únete a un club, equipo de deportes, o cualquier otro tipo de comunidad que te ayude a hacer nuevos amigos para que empieces un nuevo capítulo en tu vida, del cual la adicción no es parte. Las relaciones sociales positivas estimulan la liberación de neuroquímicos que provocan sentimientos de felicidad y satisfacción, sin la necesidad de recurrir a las drogas.
MANTENTE ALEJADO DE LOS DESENCADENANTES. Aléjate de las personas, lugares, y cosas, que te puedan dar ganas de volver a tus viejos hábitos. Puede que tengas que construir una rutina completamente nueva, hasta que aprendas a controlarte.
NO CEDAS ANTE LAS LUCHAS MENTALES. El dolor físico y mental de la abstinencia es real, puede que empieces a decirte a ti mismo que tal vez esté bien retomar el mal hábito. No escuches esa voz que te dice que te rindas. No te rindas cuando las cosas se pongan difíciles. Atravesar todo ese dolor al final vale la pena.
- Te pueden venir ideas como "es un país libre" o "todos vamos a morir de todas formas". Resiste frente a esas actitudes derrotistas.
- Repasa tu lista de motivos para dejar tu adicción cuando necesites recordar por qué lo haces. Piensa en por qué te es importante dejar la adicción.
- Visita tu terapeuta o busca ayuda en los grupos de apoyo cada vez que sientas el peligro de la recaída.
NO DEJES QUE UNA RECAÍDA SE CONVIERTA EN EL FINAL DE TU VIAJE. Todos nos equivocamos de vez en cuando. Eso no significa que debas rendirte y volver a practicar tus hábitos adictivos presentando una recaída total. Si tuviste una recaída, repasa los hechos y piensa en qué cosas debes cambiar la próxima vez que lo intentes. Ponte de pie y empieza de nuevo.
- Si te equivocaste, no dejes que la culpa y la pena te controlen. Estás haciendo tu mejor esfuerzo, y lo mejor que puedes hacer es seguir esforzándote.
CELEBRA TUS LOGROS. Haz algo lindo para ti cuando cumplas las metas que te fijaste, sin importar lo pequeñas que sean. Derrotar la adicción es un proceso increíblemente difícil, y te mereces una recompensa por tus avances.
Fuente: www.es.wikihow.com
Fuente: www.siquia.com
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